Los efectos de los piercings en la lengua en los dientes

Hoy en día, cada vez más personas optan por decorar su cuerpo con piercings, tatuajes y otras modificaciones corporales. Esta es una tendencia que afecta a todos los grupos de edad, siendo una opción popular el piercing en la lengua. Si bien estos piercings pueden ofrecer una excelente opción para la autoexpresión, pueden surgir algunos problemas potenciales, como efectos adversos en los dientes, las encías y la salud bucal en general.

El hecho es que hay varias formas en que un piercing en la lengua puede afectar negativamente a los dientes, la boca y la sonrisa.

Posibles consecuencias de las perforaciones en la lengua

Muchas personas que tienen un piercing en la lengua nunca se lo quitan. Esto se debe a que la lengua sana bastante rápido una vez que se quitan las joyas. Sin embargo, existen algunos problemas que pueden ocurrir cuando el piercing en la lengua se mantiene puesto todo el tiempo, entre ellos:

Movimiento de los dientes: la presión constante sobre los dientes posteriores hace que se aflojen y se muevan, creando así espacios. Astillamiento y agrietamiento: las joyas pueden golpear los dientes al comer o hablar, lo que resulta en dientes astillados o agrietados. Infecciones bacterianas: muchos de estos piercings resultan en infecciones, que pueden causar angina, herpes y hepatitis transmitida por la sangre.

Evitar los problemas dentales causados por los piercings en la lengua

La buena noticia es que existen medidas que puedes tomar para ayudar a evitar las posibles consecuencias negativas causadas por los piercings en la lengua. Estas cosas incluyen:

Mida el piercing correctamente, eligiendo primero una pieza de joyería más pequeña. Si selecciona metal, asegúrese de que sea de calidad para implante quirúrgico. Seleccione un estilo que funcione bien con el área de la boca donde se ubicará el piercing. Elija una bola más pequeña para debajo de la lengua. Utilice bolas de polímero en la lengua para reducir la posibilidad de dañar los dientes.

Es imperativo que también cuides bien tu piercing para ayudar a prevenir infecciones. Esto significa que usted necesita mantener su boca lo más limpia posible usando hilo dental y cepillándose todos los días.

Evite “jugar” con las joyas que se lleva a la boca. Si bien esto puede resultar tentador, puede dañar tanto las encías como los dientes. También debe asegurarse de que su piercing esté colocado correctamente y asegurarse de revisar los accesorios diariamente para evitar tragarlo accidentalmente.

El hecho es que, si bien los piercings son populares, no son muy apreciados entre los profesionales dentales, porque pueden causar bastantes problemas si no se tiene cuidado, así que asegúrese de estar al tanto de los posibles problemas que pueden surgir y tomar medidas. las precauciones adecuadas para evitar daños.